11 – 3 (Ojuani Oggundá)



Santos que hablan: Eleguá, Asojano.

Refrán: “Quien no mira adelante, detrás se queda”

Nacieron las tijeras.

Antes de salir para la calle se le debe poner a Eleguá ekú, eyá, aguaddó y epó.

Si su papá es muerto dele de comer una guinea y póngale los demás menesteres que le gustaban en vida.

La virtud de la persona está en las manos de ella.

En este oddun Eleguá acariciaba a Ochún dulcemente y ella se quedaba dormida con estas caricias. Orula le cogió envidia a Eleguá por esto.

En este oddun se pagan las culpas del amor por desobediencia.

Este es el oddun más fuerte que existe después de los oddun meyis.

La persona nunca va a ser aplastada en la tierra.

Cuidado con hincadas.

Puede verse involucrado en una tragedia en la calle.

Cuídese de que no corra su sangre.

No le falte a sus santos.

Respete a todos los religiosos.

Sea obediente.

Cuidado que lo muerda un perro.

Siempre consulte sus cosas con otras personas que tengan más conocimiento que usted.

Cerca de su casa lo están acechando.

Si va a ir al campo tiene que limpiarse antes de hacer el viaje.

Pague la deuda que usted le debe a San Lázaro.

No debe mojarse con agua lluvia.

A usted le hacen brujería.


Cada vez que usted entre a su casa, antes de salir cámbiese de ropa para que sus enemigos no lo reconozcan en la calle.

Cuidado con la candela.

Su propia familia lo envidia.

Dele todos los días gracias a Obatalá, Eleguá y Oggún.

Puede haber un embarazo tapado en su familia.

No se meta en ningún problema donde no lo llamen.

Una mujer le traerá suerte.

Vístase de blanco lo más que pueda.

Puede ser que antes de que finalice el año, un familiar de usted fallezca.

Historia donde el tigre estaba vestido de rojo y fue a casa de Orula a consultarse y este le dijo que tenía que hacer ebbó y cambiarse de ropa para que sus enemigos no lo reconocieran y que no podía salir a la calle sin antes hacerse el cambio de ropa. Entonces, cuando llego a la casa  e iba a salir para la calle la esposa le recordó el consejo de Orula. El tigre no salió y sus enemigos que lo esperaban cerca de la casa no lo pudieron agarrar.